Tibia la noche, tierna la mirada, cae la ropa y quedan nuestras siluetas reflejadas sobre el ventanal de una habitación que espera una dulce entrega de dos almas enamoradas.
Beso tu cuello, y tu acaricias mis cabellos…me miras a los ojos y me robas el aliento, sigo recorriendo todo tu cuerpo y al final te dejo temblando cual hoja al viento.
Te acaricio y te estremeces cual pétalo de rosa al contacto de la brisa, me embriago de tus besos, y dibujo tu silueta para grabarla en mis dedos.
Bailamos juntos una canción de amor, de pasión y deseo…te envuelvo en mis brazos, te lleno de besos apasionados…y al final tocamos el cielo en una entrega de amor apasionado.
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